Psicotrading: Ser rentable sin depender de la efectividad.

 



Autor: Andrés Hidalgo Castro

Más Allá de la Efectividad: La Psicología de Ser Rentable en el Trading

Al principio, me frustraba no ser siempre efectivo en mis operaciones. Quería encontrar una manera de ser impecable, pero me di cuenta de que todos tenemos un lado asimétrico en nuestro estilo de trading, y aprender a convivir con ello es fundamental. Aquí es donde el trader novato se enfrenta a un concepto que a menudo pasa desapercibido: el lado negativo del estilo de trading. Todos tenemos ese lado asimétrico. El dilema para el principiante es que busca una forma de operar que lo excluya de esta realidad; sin embargo, eso no es posible porque en todo mercado la gráfica se vuelve ilegible por momentos.

Una de mis mayores habilidades, y también una que a menudo desconcierta a muchos, es mi capacidad para ser rentable con tan solo un 20% de efectividad. El mes pasado, por ejemplo, logré una rentabilidad del +5.67% con apenas un 27% de aciertos, lo que se tradujo en una ganancia neta de 416.9 pips. Durante los meses en los que alcanzo una efectividad superior al 70%, mis ganancias superan el 20% de rentabilidad, acumulando más de 1,500 pips netos.

Esta semana fue difícil. Experimenté una pérdida general del -2.80% en mis operaciones, si hubiera enfrentado esta situación hace 7 años, probablemente habría caído en antiguos malos hábitos. El trader que se molesta por su baja efectividad casi siempre esconde malos hábitos, ya sea de forma consciente o inconsciente, como el instinto de eliminar el stop loss, operar de manera vengativa y perder lo ganado en varias rachas negativas.

Esta habilidad me permite enfrentar el mercado sin que el miedo a perder se apodere de mí, porque comprendo que un plan es un proceso con sus propios altibajos. Al principio abandonaba mi sistema de trading con el afán de ser efectivo; hasta que descubrí que ya tenía lo más difícil, y es ser rentable con o sin alta efectividad. La disciplina se convirtió en mi aliada; al igual que un atleta se adhiere a un riguroso régimen de entrenamiento, sigo mi plan de trading y aprendí a reconocer mis emociones.

Uno de los primeros obstáculos con los que me topé fue ignorar el stop loss. La idea de limitar mis pérdidas parecía contraintuitiva al principio. ¿Por qué cerrar una operación que podría recuperarse en cualquier momento? Pero pronto aprendí que dejar correr una operación perdedora solo conducía a pérdidas aún mayores y a una montaña rusa emocional que no quería experimentar.

La Disciplina como Aliada: Siguiendo un Plan

Otro hábito dañino era operar de manera vengativa. Cuando una operación no salía como yo esperaba, a menudo me sentía tentado a tomar represalias contra el mercado, tratando de "recuperar" lo perdido. Personalmente, sé que mi debilidad radica en no ser siempre muy efectivo; he aprendido a aceptar que la consistencia es más importante que la idealización del plan. 

Hay días en los que mi narrativa no coincide con la del mercado, y eso está bien; lo importante es recordar que el dolor momentáneo de una pérdida es solo una parte del proceso. La meta es que ese malestar no se convierta en un mecanismo para improvisar y ejecutar operaciones sin sentido, con el ánimo de eludir esa mala sensación. He transformado ese dolor en una oportunidad para recordar que cuando abandono mi plan, las ganancias que obtenga se van a evaporar fácilmente y las pérdidas me dolerán reconocerlas, porque me enfrentaría a un contexto desconocido.

Es crucial tener un profundo conocimiento de las herramientas que empleamos, comprendiendo tanto sus debilidades como sus fortalezas, y estar dispuesto a convivir con esas asimetrías durante momentos adversos. Cuando siempre usamos las mismas herramientas para operar, comprendiendo su lado vulnerable y su potencial, y asimilamos que es una realidad ineludible, es ahí donde el trader madura, y empieza a ver su jornada de trading como un proceso en el que hay días en los que su narrativa no coincide con la del mercado y otros sí.

A pesar de mi baja efectividad durante este mes, he aprendido a mantener la calma y a confiar en mi conocimiento. Utilizo una metodología de conteo de ondas que he perfeccionado desde el año 2017, además de seguir de cerca una lista de 8 fractales que rastreo diariamente. 




Estandarización del Plan de Trading

La estrategia es simplemente una herramienta para definir los puntos de entrada y salida en el mercado, mientras que el plan es una narrativa que se desarrolla a partir del dominio de un estilo de trading específico. Este enfoque me ha ayudado a mantener la calma en momentos de incertidumbre y a tomar decisiones basadas en la narrativa de mi plan. Entendí que la clave no radica únicamente en analizar la gráfica, sino en ejecutar y defender la narrativa frente a mis impulsos.

Hay traders hábiles para predecir tendencias con precisión, pero emocionalmente un desastre. Parece contradictorio, ¿no? Estos traders soportan pérdidas que superan su stop loss, pero se resisten a dejar que sus operaciones positivas sigan avanzando. La raíz del problema radica en que practican trading discrecional.

Existe una alternativa para resolver estos problemas: la estandarización del plan de trading. Aquí es donde practicar cobra sentido, ya que permite automatizar decisiones utilizando un estilo de trading consistente. Esta metodología ayuda a evitar los errores mencionados anteriormente. Con el tiempo, notará que las pérdidas siguen un patrón constante, lo que hace que la solución se vuelva predecible y repetitiva.

El trader apostador, impulsado por resultados rápidos, es propenso a cometer errores. Aunque el trader discrecional no se considere un apostador en principio, puede convertirse en uno cuando pierde la concentración debido a la falta de estandarización en su plan. 

Al final del día, la clave para el éxito en el trading (y en la vida) radica en la capacidad de adaptarse a medida que evolucionan las circunstancias. A través de la práctica constante y la comprensión de la narrativa en mis operaciones, estoy construyendo cada día un camino sólido hacia la rentabilidad.

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